La difusión de un “mensaje sorpresa” de la Presidencia de la República generó expectativa la noche de este domingo 18 de febrero. Algunos esperaban el decreto de una nueva reconversión monetaria y otros el anuncio de un nuevo ajuste salarial. Pero en el video de 1 minuto y 20 segundos de duración no hubo una sola noticia económica.
Nicolás Maduro apareció junto a cinco altos funcionarios del Gobierno expresándose en lenguaje de señas. La primera “combatiente” Cilia Flores; la presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Delcy Rodríguez; el ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez; el vicepresidente ejecutivo, Tareck El Aissami; y la titular de la cartera de los Pueblos Indígenas, Aloha Núñez, afirman que quieren inclusión y paz. “Tenemos un gran líder, yo lo conozco bien”, dice la esposa del jefe de Estado en el clip que generó memes y burlas en las redes sociales.
Hasta las curiosas similitudes entre esta campaña y la del expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero -en la que sus asesores también usaron la lengua de señas a su favor- también fueron explotadas en Twitter:
Pero ¿qué hay detrás de este mensaje? Para la experta en marketing político Carmen Beatriz Fernández, el alto mando gubernamental busca “banalizar la crisis” que atraviesa el país con la pieza audiovisual.
“Es un mensaje bien planificado que se inscribe dentro de la campaña de intriga para generar un impacto de expectativa en la sociedad. Lo lanzan para desviar la atención de la tragedia humanitaria hacia el ridículo. Buscan banalizar el debate y alejarlo de la realidad de crisis que vive el país”, señala.
La analista subraya que solo aparece el círculo íntimo del poder. “No salen Diosdado (Cabello), no sale (Vladimir) Padrino, pero salen El Aissami, los hermanos Rodríguez, Cilia (Flores) y (Nicolás) Maduro”.
Este mensaje, a su juicio, revela un claro deslinde entre el madurismo y el ala chavistaque maneja el constituyente Cabello. Pero también un distanciamiento de Maduro con el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) que se refleja con la creación de la nueva organización política Somos Venezuela para la campaña presidencial.
El politólogo y asesor de campañas electorales Edgard Gutiérrez también destaca la ausencia del primer vicepresidente del Psuv. “El spot demuestra quiénes son los verdaderamente cercanos a (Nicolás) Maduro y quiénes no”, opina.
“Electoralmente Somos Venezuela es el copycat (imitador) de la tarjeta de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Es la construcción de un espacio para llamar a algunos votantes que no quieren al Psuv”, afirma.
Gutiérrez señala que la división dentro del chavismo se empieza a evidenciar con la “purga” interna que dejó por fuera al exministro chavista Rafael Ramírez en 2017 y el alejamiento de otros factores del Polo Patriótico como el Partido Comunista de Venezuela (PCV) y Patria Para Todos (PPT).
Es importante recordar que en las elecciones municipales de 2017, ambas toldas no apoyaron a la candidata del Psuv en Libertador (Distrito Capital) Erika Farías y respaldaron -contra la voluntad de Maduro- al exministro Eduardo Samán, quien denunció ser víctima de prácticas fraudulentas con las que intentaron impedir la inscripción de su candidatura.
“El spot apunta a reforzar el marco narrativo de la construcción de la paz. Maduro viene diciendo desde hace años que él apuesta por la paz, mientras (denuncia que) la oposición solo quiere la perturbación social. Acusa a sus adversarios de causar muertes y violencia. En segundo lugar, como es costumbre, busca “suavizar” la imagen. Usar un lenguaje de un sector vulnerable, con música melancólica para intentar transmitir paz”, concluye.
Publicado originalmente en Efecto Cocuyo